
Hace apenas 15 años resultaba difícil imaginar que los automóviles Nissan pudieran salir de las líneas de montaje de AvtoVAZ en Rusia. Sin embargo, la alianza Renault–Nissan cambió las reglas del juego y así nació un sedán asequible, resistente y sorprendentemente práctico: el Nissan Almera. Este modelo fue pensado para climas duros y carreteras en mal estado, y precisamente por eso se convirtió en una verdadera elección popular en Europa del Este.





